"No se van a animar" leo, y sonrío con los ojos
llenitos de agua y un alarido que viene del fondo mismo de la historia me
susurra "sí, se van a animar se animaron se animan y se animarán son
asesinos y se han animado ya unas cuantas veces a lo más atroz de la historia.
Sí se van a animar porque para eso vinieron. Porque ya lo hicieron y están
desesperados por volver a hacerlo. Ya nos han bombardeado, nos han fusilado,
nos han torturado, nos han desaparecido, nos han robado los hijos. Ya lo han
hecho. ¿Por qué no volverían a hacerlo?"
Me seco las lágrimas y miro hacia el lado más luminoso de la
memoria y allí están mirándome por sobre mi tristeza, por sobre mi desazón y
desde un silencio ensordecedor me preguntan "qué van a hacer qué van a
hacer aquí estamos nosotros presentes ahora y siempre necesitamos que hagan
algo ya saben cómo ya saben qué sólo háganlo"
Y miro al cielo y los helicópteros amenazan y llamo a una
amiga y le dijo qué hacemos y decimos vamos.
Y vamos.
Aunque se animen y apliquen protocolos ahí estaremos. Por
esas voces. Esos alaridos. Por las balas que nos mataron antes y nos volverán a
matar si los dejamos.
Vamos.
No nos han vencido.
No nos vencerán.